Gabriela Salvador. Directora de GSG NAB Chile, Directora Ejecutiva de Vantrust, Seleccionada dentro del G100 como una de las Mujeres más influyentes del mundo.
Cuidando al planeta desde la inversión
No es noticia que el calentamiento global es un problema. Son años que se llevan diciendo esto, que tenemos que cuidar el mundo porque si no los recursos naturales se van a agotar. Fue así como el 29 de julio de este año se agotaron oficialmente los recursos naturales disponibles para este año. No obstante, creemos que a partir de esta realidad, sí se puede establecer un cambio, incluyendo como driver de nuestras inversiones “el impacto”, gatillante en la supervivencia de nuestras empresas. No es suficiente dejar de comer carne y dejar el uso de plásticos, el impacto se puede hacer desde el simple acto de escoger a donde estamos invirtiendo. Es así como me planteo la pregunta:
¿Cómo podríamos aportar desde la inversión de impacto a frenar la crisis climática?
Como ciudadanos informados, responsables y conscientes de esta transformación, debemos reinvertir el capital o el ahorro chileno en industrias que aporten al medioambiente y al impacto y crecimiento de la sociedad no solamente presente, sino también futura. Algunos inversionistas no quieren jugárselas por proyectos verdes porque estos no les generarán las mismas ganancias, sin embargo, esa mirada es de muy corto plazo, ya que los proyectos deben tener una visión de futuro (dado la vida útil de estos). Además, hay otra razón de peso: los clientes que hoy entraron al mercado y sí quieren invertir en este tipo de apuestas.
¿Quiénes son estos nuevos jugadores? Son personas cada vez más jóvenes, los llamados millennials y en algunos años más serán los hoy conocidos como generación Z. Ambos tienen un punto en común: un especial cuidado por el medioambiente. Por ello, al minuto de invertir y tener la opción de escoger, preferirán una empresa que tenga fondos de inversión que contribuyan a la economía circular y sean sustentables.
Como Vantrust, estamos apostando en ofrecer a nuestros clientes este tipo de proyectos. En esta línea, tenemos un nuevo fondo, el cual tiene como objetivo principal la generación de energía renovable de escala distribuida.
Junto a gestores de alto nivel e innovadores se construirán y operarán proyectos en los puntos de demanda asociados a un modelo de negocio probado con contratos de suministro (PPA), con plazos de 10 a 20 años, que otorgarán fuentes de ingresos recurrentes y en dólares.
Concretamente, en mayo de este año, cerramos el acuerdo marco para invertir con SOLCOR, compañía belga con foco en los proyectos solares bajo el modelo eco netbilling, que llega de manera pionera a Chile y de nuestra mano. Este hecho, sitúa a Vantrust como una empresa que se suma a la tendencia de las energías verdes y a la descentralización de los generadores de energía, entregando una alternativa personalizada al cliente. Esperamos contribuir a lograr hacer más eficiente el sistema energético, ya que el productor estará más cercano al punto de consumo, evitando así gastos en transporte e infraestructura.
Este fondo, al ser de largo plazo, busca generar relaciones con los gestores que decidan invertir en el proyecto, el cual va a la vanguardia de la última tecnología de economía circular dentro del mercado de la energía. El proyecto busca crear un ecosistema para retroalimentar los lazos y conexiones formados en su proceso, con lo cual se asegura alinear los incentivos con nuestros socios para así poder entregar el mejor retorno posible.
La mayoría de estos proyectos, y en especial el que estamos presentando, se basa en una idea de win-win, donde todos los actores puedan ganar. Este fondo de energía renovable busca bajar el costo de la electricidad de los clientes finales entre un 10 a 20 por ciento. Además, el medioambiente se beneficiará ya que este proyecto generará 0 emisiones y los gestores ganarán al ser potenciados por Vantrust para crecer y desarrollar su potencial en el mercado. Finalmente, el fondo ganará por su esperado resultado positivo.
Esperamos que este sea el primero de muchos proyectos de este tipo, pero también que más empresas y personas se animen a invertir en ellos y a traerlos al país.
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